Cuando muere un ser querido, su imagen en fotografía es una presencia en la ausencia. Barthes, apunta que cuando sacamos una fotografía lo que fotografiamos se atrapa, se apresa. Cuando vemos nuevamente esta fotografía la imagen que vemos no está en presente, ha pasado el instante captado, es un recuerdo. Un recuerdo que para él, es igual a muerte. La fotografía está unida al amor y a la muerte
OTROS LIBROS QUE QUIZÁ TE INTERESEN







