Descripción
Artaud no es un remedio bien presentado para enfermedades confesables (universitarias, académicas y demás ralea), Artaud es un dispositivo que nos mina, pone en crisis y presiona constantemente al asesinato de nuestro yo domesticado. Es una continua reflexión sobre nuestra debilidad y ensoñación idealistas.
Leamos a Artaud, pero preparémonos para ser heridos; a veces incluso de muerte. La experiencia Artaud debe ser una continua y ejercida violencia contra los valores que, queramos o no, detentamos y representamos, contra nuestra voluntad de considerarnos “vivos”.
Por muy buenas exposiciones universitarias que se hagan de Artaud: no se obtendrá jamás así la verdad de lo que se juega ahí en dos minutos.