Una irresistible invitación a rechazar la ética del trabajo y entregarse a los simples placeres de la vida (reír, beber, tumbarse al aire libre…). Un libro ingenioso y repleto de frases para anotar sobre la alegría de la ociosidad, pero también sobre la vejez y la abrumadora experiencia de enamorarse.
OTROS LIBROS QUE QUIZÁ TE INTERESEN