Este libro aborda las continuidades y los cambios experimentados durante la España de los años cincuenta.
Frente a aquellas visiones que hablan de una «década bisagra» entre la posguerra y el «desarrollismo» y en la que «no pasó nada», las contribuciones aquí reunidas dibujan una realidad más compleja.
La permanencia de la miseria y los cambios económicos, las estrategias empleadas por los españoles corrientes, la necesidad del régimen de adaptarse a una sociedad en cambio, la continuidad en el control social o la aparición de nuevas formas de disidencia y protesta social son algunos de los aspectos estudiados.
La década de 1950 se erige entonces en un periodo clave para entender el devenir de la dictadura y de la propia sociedad española.
OTROS LIBROS QUE QUIZÁ TE INTERESEN

