Tras la muerte del Buddha Gotama, durante 300 años aproximadamente sus enseñanzas fueron transmitiéndose entre sus seguidores generación tras generación. Hacia el siglo I a.C. hubo una importante mortandad entre los monjes y además, las posturas sobre cómo interpretar la enseñanza del maestro se habían multiplicado. Por ambos motivos la doctrina heredada decidió fijarse finalmente por escrito; el resultado de esa transcripción fue el llamado Canon Pali.
En este libro se estudian uno a uno y capítulo a capítulo, todos y cada uno de los tatados que componen el Canon Pali con el objetivo de reconstruir en todos sus aspectos y de la manera más minuciosa posible, los pilares de la más antigua enseñanza buddhista conservada.